Fecha: Marzo 20, 2013
Esta semana quisiera describir cómo son los supers aquí en
Alemania. En Oestrich tenemos 3 supers, Netto que es el más barato; Aldi y Rewe,
que es el más caro. Yo no voy a uno en específico, ya que depende de lo que
necesite y de cuál me quede más cerca. Netto y Rewe están uno enfrente del
otro, y quedan cerca del campus Schloss de la EBS, que es donde tengo la
mayoría de mis clases. Así que si voy de regreso a mi casa paso a alguno de
esos dos. Por otra parte, si estoy en mi casa me queda muy cerca Aldi, pero no
voy tanto a este porque no tiene tanta variedad como los otros, sobre todo en
lo que son frutas y verduras.
La experiencia de ir al super es muy diferente a como es en
México. Por ejemplo, para poder usar un carrito tienes que meter un euro en el
manubrio, así es como se libera. La sección de frutas y verduras es muy
pequeña, hay poca variedad y los precios son bastante altos, por ejemplo un
aguacate cuesta cerca de 1.2 euros, que son cerca de $20. Además la gran
mayoría de las frutas y verduras son hidropónicas.
También hay comida precocinada, no estoy segura si esto se
debe a que estoy en un área donde hay muchos estudiantes y no tienen mucho
tiempo para cocinar. El área de carnes frías no es muy grande, de hecho
únicamente Rewe tiene una parecida a las que hay en México, pero por ejemplo no
venden jamón, este ya viene empaquetado y es la única forma de comprarlo.
Las demás cosas son muy parecidas, aunque no hay tanta variedad
ni marcas como en México. Otra cosa que casi tampoco hay son productos light,
hay alguno que otro bajo en grasa, pero son escasos. Sin embargo, creo que lo
más impresionante son los refrescos. Yo no me había fijado porque casi nunca
los compro, pero iba a tener visitas en mi casa y quería comprar alguno, pero
me costó trabajo encontrar dónde los vendían, y se debe a una simple razón:
casi no venden. Los refrescos se encuentran en una pequeña área de un anaquel, y
hay Coca Cola, Coca light, Coca Zero, Fanta y otra marca que no recuerdo.
Aunque eso sí, hay mucha variedad de vinos, cervezas y tés.
Finalmente uno llega a la caja y como en todo super uno vacía
el carrito, pero hay otro par de diferencias muy importantes con México: todas
las bolsas de plástico cuestan y no hay nadie que ayude a empacar los
artículos. En cuanto a las bolsas he visto que la gente, o bien meten la comida
directo en la cajuela de su coche sin usar bolsas, o compran unas cuantas y las
reutilizan, o llevan una mochila o bolsa de tela para guardar todo. Yo al
principio compré bolsas de plástico grandes, así que cada vez que voy a comprar
me las llevo, o bien meto las cosas en mi mochila. Ahora, el reto está en
guardar las cosas, al principio yo intentaba empacarlas mientras la señorita
las cobraba, pero era demasiado rápida, así que me fijé en qué hacía la demás
gente y lo pasan todo al carrito y luego se orillan para meterlo en las bolsas.
Ya para retirarte devuelves el carrito en donde están los demás y te devuelve
tu euro.
Al principio es toda una experiencia ir de compras, porque el
sistema es muy diferente, y a la gente le molesta un poco si te tardas mucho en
pagar o empacar, así que se siente la presión. Pero una vez que te acostumbras
lo haces todo a buen ritmo. Para mí no es muy difícil empacar mis cosas porque
compro poco, sin embargo no me imagino hacer un super familiar; aunque,
obviamente, a todo se acostumbra uno.
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