Fecha: Enero 29, 2013
Estrasburgo es una ciudad al este de Francia que se
encuentra en la región de Alsace. Es una ciudad que aloja a miles de
estudiantes franceses y extranjeros ya que cuenta con muchas escuelas de alto
nivel. El clima ahorita en enero es muy frío, está nevando casi diario y me han
dicho que en febrero es aún más frío.
En cuanto a mi intercambio, la primera semana que
estuve en Estrasburgo fue la semana de orientación en la universidad la cual me
sirvió mucho porque nos dieron un recorrido por todo el campus y nos explicaron
cómo funcionan muchas cosas dentro de la universidad. Yo vivo en una residencia
de estudiantes a una cuadra de la escuela y al llegar tuve que ir a comprar
muchas cosas que necesitaba como sartenes, platos, almohadas, sábanas, artículos
de limpieza, etc. Creo que esta experiencia además de servirme académicamente
me va a servir para hacerme más independiente y responsable porque aquí todo lo
que necesito yo lo tengo que conseguir.
Esta semana ya empezaron las clases, lo que me llamó
la atención es que los horarios no son como en México, aquí todas las semanas
cambian porque no todas las clases son siempre los mismos días ni a las mismas
horas entonces cada día tenemos que estar checando nuestro horario. Esta semana
no tuve muchas clases, de las ocho materias que voy a llevar solo tuve cuatro
materias, la próxima semana ya voy a tener las demás clases. Me parecen muy
interesantes mis clases hasta ahorita porque son grupos grandes, la mayoría son
en auditorios y hay estudiantes franceses pero también de todas partes del
mundo. Ya nos pidieron en dos clases hacer trabajos en equipo pero nos piden
que formemos los equipos de tal manera en la que todos los integrantes sean de
diferentes nacionalidades, lo cual me parece muy bueno porque así todos
aprendemos un poco de todos.
La ventaja de esta ciudad es que es pequeña y casi
todo se puede hacer caminando, existen los trams y autobuses para transportarse
dentro de la ciudad pero yo prefiero caminar porque es una forma de conocer y
disfrutar mejor los lugares. Además otra cosa que me gustó mucho de Estrasburgo
es que hay muchas ciudades cerca a las que puedo ir sin necesidad de gastar
tanto dinero ni tiempo. Por ejemplo, el sábado en la mañana temprano me fui con
unas amigas a Basilea en Suiza, tomamos el tren a las 8 AM y llegamos allá a
las 9:15 AM, estuvimos todo el día caminando y conociendo los lugares que nos
habían recomendado y a las 7 PM tomamos el tren de regreso a Estrasburgo.
Basilea es una ciudad muy bonita y pequeña, por eso pudimos conocerla en poco
tiempo. El tren hizo entre 3 y 4 paradas en pueblitos de Francia antes de
llegar a Basilea. Fue un viaje rápido pero valió mucho la pena.
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