José Javier Zamora Serrano
Economía
Dragon-Mart ¿Qué onda?
Pues
bien mis queridos lectores, bienvenidos a mi primera entrada de este año. En
esta ocasión abordaremos un tema que no ha llegado a oídos de muchos, pero ha
sido bastante controversial entre los que lo conocen: el Dragon Mart de Cancún
que tenía prevista su apertura el 14 de Abril del próximo año.
¿Qué
es Dragon Mart? es un centro comercial, una puerta de productos chinos a los
continentes en donde se establece, siendo a la vez un proyecto habitacional. En
Dubai, que fue el primer lugar en donde se estableció, tiene una extensión de
1.2km y cuenta con más de 3900 locales comerciales, todos atendidos por
personal de China. Y aquí es donde entra la parte “habitacional”, pues los
vendedores que emigraron a la ciudad viven en casas pequeñas justo al lado del
gran centro comercial.
¿Y
México qué? Resulta que Dragon Mart quiere llegar a nuestro país junto con
aproximadamente de 8 mil chinos a nuestras hermosas playas de Cancún. Se
proponen convertirse en la puerta del gigante asiático hacia Sudamérica y
Centroamérica, en un extenso terreno de 561 hectáreas que incluirían 800
viviendas. El capital humano sería, al igual que en Dubái, 100% chino.
Otro
sector que no tardó en reaccionar fue el de los ambientalistas; la construcción
no cumple con normas del Programa de Ordenamiento Ecológico Local ni del
Instituto de Impacto y Riesgo Ambiental. En específico, problemas con el uso de
suelo y las Unidades de Gestión Ambiental 26 y 27.
Pero
hay otro gran problema que a continuación explicaré: la subvención aplicada a
los productos que llegaran a nuestro país por parte del gobierno chino.
Básicamente los dirigentes de la administración pública en China, dan dinero a
las empresas de su país para que la producción tenga un costo menor y por lo
tanto el producto sea de menor precio; esto es una violación a las normas de
comercio internacional y este es el principal problema, pues si estos productos
llegaran a entrar, serían una verdadera amenaza hacia nuestros productos al
tener no sólo precios bajos por su mano de obra barata, sino también por el
apoyo gubernamental. Además al ser los locales dirigidos por familias chinas,
no ayudará para nada al empleo del mexicano.
Hasta
el momento parece ser que este ambicioso proyecto no se llevará acabo, pero
falta ver las resoluciones en los próximos meses. Esperemos que la
administración del Estado de Quintana Roo apoye a sus pequeños productores,
pues aunque el libre comercio es necesario, en estas condiciones es injusto.
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