MARKETING GLOBAL, por Karla Diez

Karla López Diez de Bonilla

Administración y Mercadotecnia

 

Mercadotecnia globalizada

La globalización ha cambiado la manera de ver el mundo, existen en el mundo un sinfín de culturas y  más de 6000 lenguas diferentes, cada cultura tiene sus costumbres, creencias y cosmovisión.

En un mundo globalizado como en el que vivimos debemos tomar en cuenta todas las culturas para poder llegar al éxito en la mercadotecnia, mientras antes se manejaban competidores locales ahora son internacionales. Hay cada vez más marcas, negocios, empresas, etc. en el mundo.

El reto de hoy en día para las empresas es expandirse a un mercado internacional sin perder su credibilidad y certeza en el asunto. Muchas empresas tienen miedo de la expansión por todo lo que esta implica, hay que adaptar el producto, las estrategias de venta, mercadotecnia, etc., pero si deciden aceptar el reto y tienen una planeación estratégica y coordinada pueden llegar a grandes resultados en relativamente poco tiempo. Aunque el cambio puede ser costoso hay que primero realizar un comparativo entre los beneficios que esto pueda traer y las contras que por otro lado pueden afectar.

Muchas empresas optan por la adaptación del producto al nuevo mercado, ya que hay que recordar que productos que funcionan muy bien en cierto lugar pueden no ser tan útiles incluso a poca distancia.  Las empresas deben hacer investigaciones de mercado exhaustivas para conocer bien su nuevo target y poder, a partir de esto, adaptar el producto a las necesidades específicas del consumidor.

Hay veces que el producto es útil sin necesidad de hacer modificaciones, en estos casos, quizá lo más conveniente sea la adaptación de la estrategia de mercadotecnia, así como la diferente publicidad que se diseñe para el lugar. Para esto es importante recordar las diferentes costumbres del lugar al que se pretende llegar, ya que un mensaje o una imagen podría ofender a cierto público causándole a la empresa una mala reputación, mientras que a otro lo divierte y le resulta a la empresa como el aumento de sus ventas.

Nunca se deben olvidar las implicaciones legales que hay detrás, una compañía puede resultar demandada por una publicidad ofensiva o incluso por no cumplir con las especificaciones en los empaques, características, calidad, entre otras.

La globalización es un arma de dos filos, nos puede permitir la expansión de nuestro negocio si es bien aprovechada y se tienen las posibilidades. Aunque por el otro lado no hay que olvidar que abre las puertas al mundo, de modo que las cosas no sólo salen sino que también entran, haciendo que la competencia sea mayor y los competidores más variados, esto puede afectar a pequeñas empresas que no tienen el capital para luchar contra grandes compañías que tienen un gran poder económico y un enorme capital humano o tecnológico.